¿Es obligatorio contratar un seguro para perros en 2025?

Tener un perro implica muchas más responsabilidades que simplemente ofrecerle alimento y cariño. Desde paseos diarios, visitas regulares al veterinario, vacunas y educación adecuada, hasta asegurarse de que el entorno y el estilo de vida del dueño se adapten a las necesidades del animal.

Hoy en día, una de las preguntas más frecuentes que se hacen los futuros propietarios es: ¿es obligatorio contratar un seguro para perros? Te lo explicamos con detalle.

Seguro obligatorio para perros: ¿qué dice la ley?

La aprobación de la Ley 7/2023, de 28 de marzo, sobre los derechos y el bienestar de los animales, ha traído cambios importantes. A partir del 29 de septiembre de 2023, se establece la obligatoriedad de contratar y mantener en vigor un seguro de responsabilidad civil por daños a terceros para todos los perros, sin importar su raza.

Sin embargo, aunque la ley está en vigor, este apartado concreto todavía no es de cumplimiento efectivo hasta que se desarrolle reglamentariamente. Es decir, el seguro para perros será obligatorio, pero aún estamos pendientes de la normativa específica que detalle cómo debe implementarse.

¿Qué cobertura debe tener el seguro obligatorio para perros?

Aunque no se han publicado aún los detalles finales, se espera que el seguro de responsabilidad civil cubra:

• Daños materiales que el perro pueda causar a otras personas o propiedades.
• Daños personales (por mordedura o accidente, por ejemplo).

Hasta ahora, solo era obligatorio para las razas consideradas potencialmente peligrosas, según el Real Decreto 287/2002, donde se exigía una cobertura mínima de 120.000 euros para poder obtener la licencia correspondiente.

¿Dónde era ya obligatorio contratar un seguro para perros?

Antes de esta nueva normativa estatal, había comunidades autónomas como la Comunidad de Madrid o el País Vasco que ya exigían a todos los propietarios de perros (sin distinción de raza) la contratación de un seguro de responsabilidad civil.

Así que si resides en alguna de estas regiones, probablemente ya cumplas con esta futura exigencia.

¿Qué ventajas ofrece contratar un seguro para perros?

Aunque el seguro obligatorio para perros se centra en la responsabilidad civil, existen otros tipos de seguros para mascotas que pueden ser muy beneficiosos:

• Cobertura de gastos veterinarios: revisiones, cirugías, hospitalización o tratamientos de urgencia.
• Asistencia jurídica: en caso de conflictos derivados de incidentes con terceros.
• Servicios de localización: en caso de pérdida o robo del animal.
• Indemnizaciones: en caso de accidente grave o fallecimiento del perro.

Estos servicios adicionales no son obligatorios, pero contratar un seguro más completo puede representar un importante ahorro en gastos imprevistos y aportar tranquilidad.

De hecho, las incidencias veterinarias, como accidentes o enfermedades, son mucho más habituales de lo que parece. A modo de ejemplo, entre las llamadas más frecuentes a los seguros de mascotas de compañías como MAPFRE destacan precisamente los partes por accidentes o enfermedades repentinas.

¿Qué pasa si no contrato el seguro para mi perro?

Una vez que se desarrolle la regulación que haga efectivo el seguro obligatorio, no disponer de él podría conllevar sanciones económicas. Aunque aún no se conocen las cuantías exactas, en general, la Ley de Bienestar Animal contempla multas que pueden ir desde 500 euros hasta 10.000 euros para infracciones leves como el incumplimiento de documentación o seguros obligatorios.

Por tanto, lo más prudente es anticiparse y contar ya con un seguro adecuado para tu perro.

Conclusión: mejor prevenir que lamentar

Aunque todavía estamos a la espera de la publicación del reglamento que regule de manera definitiva el seguro para perros obligatorio, la tendencia es clara: todos los propietarios de perros deberán contar con una póliza de responsabilidad civil tarde o temprano.

Más allá de la obligación legal, un seguro ofrece protección económica, tranquilidad y respaldo jurídico frente a situaciones inesperadas. Si quieres lo mejor para tu mascota (y para tu bolsillo), contratar un seguro no solo es recomendable, sino una decisión responsable.