Edad mínima y máxima para asegurar a tu mascota
Uno de los primeros requisitos que revisan las compañías aseguradoras es la edad del animal. La razón es simple: los animales demasiado jóvenes aún no han completado su desarrollo inmunológico y los más mayores suelen presentar más riesgos de salud.
- Edad mínima: 3 meses. Algunas aseguradoras pueden exigir que el animal haya completado su primer ciclo de vacunación.
- Edad máxima de contratación: generalmente entre los 7 y los 9 años. No obstante, algunas pólizas permiten asegurar a mascotas de hasta 10 años si gozan de buena salud.
Es importante destacar que, una vez contratada, muchas pólizas permiten renovar la cobertura anualmente incluso si el animal supera la edad límite inicial.
Identificación obligatoria mediante microchip
El microchip es un elemento clave en la contratación del seguro. Se trata de un dispositivo electrónico que contiene un número único vinculado a una base de datos oficial, y que permite identificar al animal en caso de pérdida o extravío.
Este requisito no es solo exigido por las aseguradoras, sino que además es obligatorio por ley en España para perros, gatos y hurones. Si tu mascota aún no tiene microchip, acude a tu veterinario para su implantación antes de solicitar un seguro.
Cartilla veterinaria actualizada
Las aseguradoras requieren una cartilla sanitaria al día para verificar el estado de salud de tu mascota. Este documento debe incluir:
- Las vacunas obligatorias según la comunidad autónoma (como la vacuna antirrábica).
- Desparasitaciones internas y externas recientes.
- Historial médico relevante (enfermedades previas, tratamientos o cirugías).
Una cartilla incompleta o desactualizada puede provocar que se deniegue la cobertura o que se excluyan determinadas garantías.
Declaración de salud y condiciones preexistentes
La mayoría de aseguradoras solicitan una declaración responsable sobre la salud del animal en el momento de contratar la póliza. Esto puede implicar:
- Un cuestionario veterinario con preguntas sobre enfermedades previas, tratamientos o cirugías.
- Aportar informes médicos si la mascota tiene antecedentes relevantes.
Las condiciones preexistentes, como displasias, alergias crónicas o epilepsia, suelen quedar fuera de la cobertura. Es recomendable preguntar por las exclusiones específicas antes de firmar el contrato.
Raza del animal: restricciones y condiciones especiales
Las compañías de seguros también analizan la raza del animal antes de ofrecer cobertura. Esto es especialmente relevante en el caso de los perros potencialmente peligrosos (PPP), como el pit bull terrier, rottweiler o dogo argentino.
En estos casos, es habitual que se exija:
- Una prima más elevada para la responsabilidad civil.
- Condiciones de seguridad como bozal, correa corta y licencia municipal.
Algunas aseguradoras no aceptan ciertas razas o aplican límites de cobertura más estrictos. Asegúrate de revisar este punto si tu perro pertenece a una raza catalogada como PPP.
Seguro obligatorio según la Ley de Bienestar Animal
Desde 2023, la nueva Ley de Bienestar Animal obliga a todos los propietarios de perros a contar con un seguro de responsabilidad civil. Esta norma tiene como objetivo cubrir los posibles daños que el animal pueda causar a terceros, tanto en el hogar como en espacios públicos.
El incumplimiento puede acarrear multas de hasta 10.000 € en algunos casos. Si aún no tienes una póliza, puedes consultar más información sobre las coberturas obligatorias y opcionales que ofrece este tipo de seguro.
Documentación necesaria para contratar
Para completar la contratación, las compañías solicitan una serie de documentos básicos:
- DNI o NIE del titular del seguro.
- Número de microchip del animal.
- Cartilla sanitaria actualizada o pasaporte veterinario europeo (si aplica).
- En algunos casos, una foto del animal puede ser requerida para completar el perfil.
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