El Alcohol etílico y benzalconio cloruro es un compuesto utilizado principalmente como desinfectante y antiséptico. Su acción se basa en la capacidad del alcohol etílico para eliminar microorganismos y el benzalconio cloruro, que actúa como un conservante y agente antimicrobiano. Se emplea en la limpieza de superficies y en productos para la higiene de manos, contribuyendo a la prevención de infecciones.