Bálsamo de Perú y aceite de ricino son componentes que se utilizan en el ámbito médico por sus propiedades emolientes y antiinflamatorias. El bálsamo de Perú es una resina natural que se extrae de ciertos árboles y se emplea en el tratamiento de diversas afecciones cutáneas, mientras que el aceite de ricino, obtenido de las semillas de la planta Ricinus communis, se utiliza por sus efectos laxantes y como hidratante para la piel. Juntos, estos componentes pueden ayudar a aliviar irritaciones y promover la cicatrización de la piel.